15 años proporcionando acceso a agua segura
Promesa
Nos comprometemos a cubrir el derecho de acceder a agua segura, evitando que los ciudadanos dejen de ir a trabajar, estudiar o no puedan rendir bien en su día por alguna enfermedad estomacal. Asimismo, tenemos la responsabilidad de concientizar a la sociedad sobre esta problemática y lograr que más personas se unan a proveer agua segura a quienes lo necesitan.
Que la falta de agua segura ya no sea un problema para más peruanos y así todas las familias puedan gozar de salud y bienestar.
Visión
Misión
Fabricar filtros de calidad para proveer agua segura a familias que no tienen acceso a esta y así pueda desarrollar sus vidas sin problemas de salud.
Ya beben agua segura
Gracias al Filtrón
Donatilda
Taype
Promotora de Salud de la
localidad de Paria,
Pilpichaca, Huancavelica
Los Filtrones han cambiado nuestras vidas. La instalación y su uso es muy sencillo. Cada semana hacemos una limpieza y mantenimiento. El agua que sale del Filtrón lo usamos para tomarla, para cocinar y lavar nuestras verduras y frutas, ya no tenemos que hacer hervir agua para ello, ganamos tiempo. Todas las familias que tenemos el Filtrón estamos contentos.
Catherine Polino
Catherine, una estudiante de 21 años, nos cuenta cómo el Filtrón ha beneficiado a su familia en su economía y tiempo.
Nuestros
Colaboradores
Historia del Filtrón
Hace 14 años, a partir del terremoto del 2007 en Ica, en el sur del Perú, la empresa peruana Merinsa tuvo una misión. Instituciones caritativas les pidieron filtros de bajo costo que garanticen agua segura, no requieran energía y sean sostenibles. Al no tener esta alternativa en su portafolio de productos, investigaron una alternativa de filtro, y encontraron a la ONG Potters for Peace, creadores de un filtro cerámico que brinda agua segura. Ellos se dedican a enseñar a instituciones y empresas a cómo fabricar sus filtros con insumos locales. Merinsa con un sentido de RESPONSABILIDAD SOCIAL EMPRESARIAL, decidió emprender en el aprendizaje y fabricación de este filtro llamado el Filtrón. Después de casi 10 meses de prueba, error y asesoría directa de la ONG, se logró el objetivo.
